Como expliqué en el anterior Post llegamos a Manila y tras pasar un día esperando el vuelo a Tagbilaran ( Aeropuerto principal de Bohol ) llegamos al mismo para dirigirnos a una pequeña península en el extremo sur-oeste de la isla ( Panglao )
Es pronto, pero tenemos muchas horas de vuelo a nuestra espalda, así que no por falta de ganas decidimos tomarnos el día tranquilo y comenzar las inmersiones el día siguiente, y que puedo decir, increíbles, una toma de contacto buenísima, sobre todo si os gusta la microvida y encontráis un Divemaster como el nuestro ( Noel ), tan atento a cualquier animal por pequeño que sea y a nosotros, adaptándose a nuestros caprichos más haya de lo imaginable para las normas conservacionisas de PADI.
Aparte de las inmersiones, realizamos una vertiginosa visita a las Chocolate Hills en moto, batiendo todos los records razonables con unas motos que alquilamos en el mismo centro.
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